Autor: Zhou Ziqi (Universidad de la Ciudad de Hong Kong)
En 2015, el lanzamiento de la red principal de Ethereum abrió una nueva era de contratos inteligentes para la tecnología blockchain, y sentó las bases para su aplicación en diversos escenarios más allá de Bitcoin. Desde entonces, la blockchain ya no es solo la tecnología de libro mayor distribuido detrás de Bitcoin, sino que lleva consigo más expectativas de "descentralización", "colaboración confiable" y más.
Gracias a la conexión natural entre la blockchain y la circulación de fondos, el sector financiero tradicional ha comenzado a prestarle atención y a intentar utilizarla para la optimización de procesos como la liquidación y el compensamiento de fondos. Un informe del Foro Económico Mundial (WEF) de 2015 señaló que instituciones como Goldman Sachs, JPMorgan, el Grupo de la Bolsa de Valores de Londres, Wells Fargo y State Street han mostrado un gran interés en la tecnología blockchain, explorando su aplicación en el proceso de liquidación. A finales de 2017, IBM publicó un informe que abarca pagos transfronterizos, educación, seguridad alimentaria, autenticación de identidad, seguros.