¿Cómo los encriptadores han evaporado billones de dólares?

El yate gigante "Much Wow" debería haber sido el juguete emblemático de los millonarios de la encriptación. Este lujoso yate de 171 pies de largo tiene un valor de 50 millones de dólares y estaba programado para ser entregado en julio de este año. Sin embargo, su comprador Three Arrows Capital(3AC) solicitó la quiebra y desapareció antes de la botadura del yate, dejándolo abandonado en la costa italiana.

3AC fue fundado por dos graduados de la Universidad de Andover, Su Zhu y Kyle Davies, y fue uno de los fondos de cobertura más respetados en la industria de la encriptación. Pero en junio de este año, 3AC colapsó de repente, desencadenando una serie de reacciones en cadena que llevaron a una venta masiva de Bitcoin, haciendo que los logros de la industria de la encriptación en los últimos dos años se perdieran.

El colapso de 3AC causó enormes pérdidas a varias empresas de encriptación. Voyager Digital solicitó protección por bancarrota como resultado. Genesis Global Trading y Blockchain.com perdieron respectivamente 2.3 mil millones de dólares y 270 millones de dólares. Los expertos de la industria creen en general que 3AC tiene una responsabilidad importante en el colapso de las criptomonedas en 2022, lo que llevó a la evaporación de más de un billón de dólares en valor de mercado.

Su Zhu y Davies inicialmente se centraron en el comercio de arbitraje de divisas, luego se trasladaron a la encriptación. Obtuvieron una gran cantidad de seguidores al hablar activamente en Twitter, promoviendo la teoría del "superciclo" de Bitcoin. 3AC se expandió rápidamente, invirtiendo en una variedad de proyectos de encriptación a través de un gran endeudamiento.

Sin embargo, la enorme apuesta de 3AC en GBTC comenzó a tener problemas. A principios de 2022, el fondo parecía decidir aumentar el riesgo de inversión en un intento de recuperarse. En febrero, 3AC invirtió 200 millones de dólares en el proyecto Luna, lo que resultó ser un golpe fatal. En mayo, Luna colapsó y 3AC sufrió grandes pérdidas.

En las próximas semanas, 3AC tomó préstamos de varias partes para pagar deudas, pero pronto no pudo continuar. A mediados de junio, Su Zhu y Davies dejaron de responder a los acreedores y transfirieron fondos. El 1 de julio, 3AC solicitó la quiebra.

Actualmente, el liquidador solo ha recuperado 40 millones de dólares en activos, muy por debajo de los 2.8 mil millones de dólares en reclamaciones de los acreedores. Su Zhu y Davies están desaparecidos y podrían haberse escapado a Dubái. Las autoridades están investigando si 3AC ha cometido fraude.

Este colapso expuso los riesgos sistémicos de la encriptación, y también dio una lección a aquellos inversores que veían a 3AC como "genios". Como dijo Davies: "Cuando el mercado está bien, lo hacemos muy bien. Simplemente perdemos más en las etapas malas."