No lamas el helado cuidadosamente: se derrite más rápido que tú.
Lo mismo ocurre con los perros de tierra: o se traga todo de una vez, o se mira cómo se va el tiempo.
No dudes, deja que lo que no se puede retener se vaya.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
No lamas el helado cuidadosamente: se derrite más rápido que tú.
Lo mismo ocurre con los perros de tierra: o se traga todo de una vez, o se mira cómo se va el tiempo.
No dudes, deja que lo que no se puede retener se vaya.